jueves, junio 15, 2006

Belleza


Supongo que no siempre uno se encuentra de frente con algo que le hace vibrar, que le provoca esa sensación de ingravidez tan característica de las ocasiones en las que uno se pone cara a cara con la belleza.
No siempre uno es consciente de la misma cuando la tiene delante, quizás porque estamos acostumbrados a obviar lo más increíble de la vida...
¿seguiremos mañana?